2/6/16

American Horror Story: Asylum

Ayer terminé de ver la segunda temporada de esta serie. Cada temporada se sitúa en una historia distinta e independiente de la anterior y en este turno nos movemos a Briarcliff un antiguo hospital de tuberculosis que es ahora un manicomio dirigido por la iglesia. Con esta presentación quién no se sentiría atraído. 

¿Qué nos ofrece esta temporada? Pues aunque parezca mentira, una historia aún más adictiva que la primera. 1964, un manicomio dirigido, la iglesia como dirigentes de este manicomio, un psicópata asesino y una reportera con una gran ambición. Qué pasa si lo mezclamos todo: que tenemos una historia increíble de intriga, misterio y revelaciones que te dejarán pegado al televisor desde el minuto 1 hasta el 50 del capítulo final.


Uno de los pilares con los que ha contado ‘American Horror Story: Asylum’ ha sido la fortaleza que la mayoría de los personajes ha presentado a lo largo de la historia, secundarios incluidos. Todos han tenido algo que aportar y han protagonizado momentos que nos han marcado durante la temporada, convirtiendo a la ficción en una de las mejores que se han emitido durante los primeros meses del curso televisivo. Una vez más, la tensión ha estado bien manejada a lo largo de cada capítulo en particular y la temporada en general, dejándonos con esas ganas de más y llevándonos hasta ese enfrentamiento final entre Lana y su hijo, una escena que consiguió impactarme y a la vez satisfacer mis expectativas.



Observar la evolución de Lana ha sido una de las joyas de la segunda temporada de la serie. A través de este personaje hemos visto la manera en la debe enfrentarse a las consecuencias de su ambición y a los errores del pasado. Como bien recordó Jude cuando ambas se conocieron (un mensaje que también está dirigido a nosotros como espectadores y que es una clara promesa de intenciones de cara al futuro), el mal le miraría a la cara si ella pretendía hacer lo mismo. Y, en esa escena final, vemos el resultado de la presencia del mal, aunque con una resolución distinta a lo visto en el pasado. En esa sorprendente escena, en la que Lana acaba con la vida de su hijo, observamos la transformación de su personaje, convertida en una mujer fría y decidida que sabe engañar al psicópata en que se ha convertido pese a que no pudo hacer lo mismo con el antiguo. 


También hay que hablar sobre el personaje de la hermana Jude que presenta una evolución muy compleja a lo largo de toda la serie. Empieza viéndose como la culpable de todo lo que pasa en el psiquiátrico: de sus métodos rudimentarios y de las malas maneras que tratan a los internos. Pero hacia el final vemos la parte más humana de la monja y observamos como no es más que otra víctima de la locura de Briarcliff. La escena del último capítulo en la que está jugando con los hijos de Kit es realmente conmovedora.

 Por ponerle alguna pega a esta temporada diría que la historia de extraterrestres de Kit aunque necesaria, me parece que le resta realismo a la saga y nos hace sentirnos a veces desligados de la trama principal. Aunque aún así no deja de ser fundamental para el desarrollo de la trama y tiene sus partes buenas, sobre todo en el desenlace de la trama.




30/5/16

American Horror Story: Murder House


Ayer vi la primera temporada de la serie que está arrasando por todo Estados Unidos, American Horror Story: Murder House.

La serie es la historia de la familia Harmon, que se mudan a una mansión con el fin de solucionar sus problemas familiares. Lo que ellos no saben es que esa casa está embrujada e irán descubriendo sus secretos y a las misteriosas personas que rodean la casa. 

La familia Harmon es la protagonista principal de este puzzle de diferentes personajes que componen la serie y puedo decir que aunque al principio parezcan el típico matrimonio en crisis por infidelidad y una hija adolescente con problemas, dotan de gran personalidad a éstos personajes. La interpretación más destacable es la de una joven Taissa Farmiga que me sorprende el realismo con el que plasma los sentimientos de su personaje y sus problemas tanto físicos como psicológicos, sobre todo psicológicos, no dejando caer a Violet, su personaje, en la típica adolescente depresiva de serie de televisión que solamente es drama, drama y más drama, sino que tiene una mezcla de sentimientos: amor, alegría, tristeza, odio, etc. La interpretación de Connie Britton de una esposa abnegada y en una depresión constante y algo histérica es casi perfecta, pero a veces cae en una simpleza que no me gusta mucho y creo que en ocasiones le falta algo de fuerza a su personaje, incluso parece que tiene horchata algunas veces, pero bastante conseguido y por último, y no menos importante, la actuación de Dylan McDermott como el marido infiel, atractivo, exitoso y arrepentido, Ben, que a mí particularmente me llegó a caer mal este personaje, por lo tanto puedo decir que ha sido también una muy buena actuación pero en ocasiones se llevan más la presencia pantalla otros personajes menos principales en la escena, pese a que él este en ella.


Uno de los personajes más carismáticos y sin duda, uno de los mejores de la primera temporada es el de Constance, interpretado por una magnífica Jessica Lange, con este personaje nos da una lección de lo que es una muy buena interpretación y de como un personaje pese a ser no muy ortodoxo lo acabas adorando y quieres que salga en todos los episodios. La estética sin duda es una de las cosas más importantes de esta serie, la atmósfera de misterio, los colores oscuros y fríos, la simbología de muchos de los pequeños detalles que se van dejando caer durante los distintos episodios, como por ejemplo la contraposición entre una Moira joven y una Moira mayor según quién sea el que esté observando y las intenciones que tiene, aunque generalmente la Moira joven se presenta al hombre, dado que se supone que no ve más allá de sus instintos muchas veces y una Moira mayor para la mujer, dado que se supone que ve no únicamente lo físico sino que se fija mucho en lo psicológico; o también, la casa en sí, un símbolo que será uno de los más importantes de la serie dado que es el escenario principal de la acción.


La única pega que puedo ver en este temporada es el final que no me terminó de convencer, me esperaba algo más grandioso y se quedó en algo llamativo pero se merecía un final de los que te dejan sin habla, aun así fue genial la última escena final  sin duda fue una contraposición irónica y que consiguió que pese a que no me gustó el final del todo, fuera bastante aceptable, pero, pese a ello, la serie en su conjunto es muy buena. Solo puedo decir una cosa, tengo la segunda temporada lista.


26/5/16

X-Men: Apocalipsis


La última entrega de la aclamada saga de los mutantes más famosos del mundo, X-men: Apocalipsis, fue estrenada el pasado 20 de mayo. 

Pese a que aún no se ha estrenado en Estados Unidos (lo hará este fin de semana), 'X-Men: Apocalipsis' ha arrancado su andadura comercial con el pie derecho. El film ha logrado recaudar más de 92 millones de euros en todo el mundo, liderando las taquillas de 71 de los 75 países en los que se ha estrenado, destacando los ingresos recaudados en Gran Bretaña (9,37 millones de euros), México (7,67M), Brasil (5,89M) y Rusia (5,80M). La película, además, ha logrado ser el mejor estreno de la historia de Fox en seis países: Filipinas, Colombia, India, Indonesia, Singapur y Tailandia.

En España, 'X-Men: Apocalipsis' también ha logrado colocarse número 1 en taquilla con 1,62 millones de euros de recaudación y 240.000 espectadores. La película ha logrado superar este fin de semana a 'Angry Birds' (la segunda más taquillera) en más de 700.000 euros y ha obtenido además el mejor rendimiento por pantalla de las 20 películas más taquilleras (2.186 euros por copia).




Pero, ¿de qué trata esta película? Esta entrega de la saga se sitúa después de la película X-Men: Días del futuro pasado y continúa también con la historia iniciada en X-Men: Primera Generación. Aunque no es estrictamente necesario haber visto la trilogía original de la saga, es bastante recomendable para poder disfrutar plenamente de este largometraje. En esta secuela (o precuela, depende de desde donde lo mires) nos reencontraremos con viejos conocidos de la saga en su versión joven, cuando solo eran unos adolescentes que todavía están aprendiendo a usar sus dones. 

Diez años después de los hechos ocurridos en Días del futuro pasado, los caminos de Magneto (Michael Fassbender), Mística (Jennifer Lawrence) y Charles Xavier (James McAvoy) se han separado, pero volverán a unirse cuando Apocalipsis (Oscar Isaac) despierte. Este mutante que, desde los inicios de la civilización, fue venerado como un Dios, es el primer y más poderoso mutante del universo de los X-Men de Marvel.

Apocalipsis ha acumulado los poderes de muchos otros mutantes, convirtiéndose en inmortal e invencible. Tras despertar después de miles de años, está profundamente desilusionado con el mundo que se encuentra. Es entonces cuando recluta un equipo de poderosos mutantes, incluido Magento, para eliminar a la humanidad y crear un nuevo orden mundial en el que él reinará.



La película también guarda momentos míticos en la saga como cuando se conocen Cíclope (Tye Sheridan) y Fénix, más conocida como Jean Grey (Sophie Turner). Y por no hablar de la relación entre Charles Xavier y la inspectora de la CIA Moira Mactaggert (Rose Byrne). También los emotivos momentos de las relaciones paternales de Magneto. Y ya que estamos la aparición estelar de Quicksilver (Evan Peters) bajo la música Sweet Dreams (Are Made Of This) que seguro le sacará más de una sonrisa al espectador.


El único problema que tiene la película es el villano; Apocalipsis puede no llegar a resultar un enemigo lo suficientemente convincente. No como al principio que se creía que la interpretación del actor Oscar Isaac no estaría a la altura sino por la poca vinculación de este enemigo con el resto de la saga. Ya que por una vez no nos enfrentamos al gobierno de EE.UU. ni a Magneto, sino más bien a un enemigo desconocido por todos hasta la fecha. Aunque está sensación se ve menguada por la aparición de sus 4 "jinetes" donde nos encontraremos con personajes muy característicos de la saga como Tormenta (Alexandra Shipp) que hace que nos resulte más familiar.


En definitiva, una película indispensable para cualquier fan de la saga.


Esteban J. Jiménez Párraga.